La artista estadounidense, la actual mujer de Marc Anthony y madre de gemelos Jennifer López, es noticia por haber confesado públicamente estar muy preocupada de ser incapaz de volver a adaptarse al ritmo frenético de trabajo al que estaba acostumbrada antes de quedarse embarazada.
La cantante y actriz de 39 años, mujer del también cantante Marc Anthony con el que tiene dos hijos gemelos, Max y Emme, está actualmente inmersa en el rodaje de su nueva película The Back-Up Plan tras 3 años de retirada del mundo del espectáculo.
Fue en el programa de televisión estadounidense Entertainment Tonight, en el que la actriz confesaba: "los días antes (de comenzar con el rodaje), me puse realmente muy nerviosa. Estaba como... ¿y si me he olvidado de actuar?".
En su nueva película, Jennifer encarna a la dueña de una tienda de animales, una mujer desafortunada en el amor que está como loca por tener un hijo. Finalmente, decide optar por la fecundación artificial, pero poco después conoce a su compañero Stan, interpretado por el actor Alex O'Loughlin, de quien se acaba enamorando.
A pesar de sus nervios iniciales, Jennifer no tuvo problema alguno en adaptarse a su anterior ritmo de trabajo y manifestó: "Francamente, uno de los mejores días de mi vida fue el día que volví al rodaje. Me moría por hacer esta película, y llevándome a los bebés al rodaje esa mañana, pensé: Dios mío, están aquí conmigo; estoy rodando una película y ellos están aquí conmigo. Es genial".
La cantante y actriz de 39 años, mujer del también cantante Marc Anthony con el que tiene dos hijos gemelos, Max y Emme, está actualmente inmersa en el rodaje de su nueva película The Back-Up Plan tras 3 años de retirada del mundo del espectáculo.
Fue en el programa de televisión estadounidense Entertainment Tonight, en el que la actriz confesaba: "los días antes (de comenzar con el rodaje), me puse realmente muy nerviosa. Estaba como... ¿y si me he olvidado de actuar?".
En su nueva película, Jennifer encarna a la dueña de una tienda de animales, una mujer desafortunada en el amor que está como loca por tener un hijo. Finalmente, decide optar por la fecundación artificial, pero poco después conoce a su compañero Stan, interpretado por el actor Alex O'Loughlin, de quien se acaba enamorando.
A pesar de sus nervios iniciales, Jennifer no tuvo problema alguno en adaptarse a su anterior ritmo de trabajo y manifestó: "Francamente, uno de los mejores días de mi vida fue el día que volví al rodaje. Me moría por hacer esta película, y llevándome a los bebés al rodaje esa mañana, pensé: Dios mío, están aquí conmigo; estoy rodando una película y ellos están aquí conmigo. Es genial".
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